EMOCIONES COLOREADAS


 EDUCACIÓN EMOCIONAL
Cuento como disfrute.
Cuento como disparador para poner en diálogo nuestras emociones.
¡A Trabajar en Familia Sala Amarilla!

1.Lectura del cuento “EL MONSTRUO DE COLORES”.
Audiocuento:

2. Elaborar en casa los frascos, utilizando envases o botellas de plástico. 
Lo que tengan disponible. ¡No hay que salir a comprar nada! 
Es muy importante quedarse en casa estos días.
·       Identificar cada envase con un color de los que se mencionan en el cuento, utilizando recortes de telas, papeles de colores, cintitas… o lo que tengan! 
Las infancias podrán hacer cartelitos, a modo de etiqueta utilizando esos colores. 
Los adultos ayudaremos escribiendo la emoción que corresponda en cada una.
·       Realizar tarjetas donde las imágenes transmitan diferentes sentimientos, emociones y acciones. (recortado de revistas, dibujos o fotos). 
Recuerden que el adulto acompañará el hacer del niño asistiendo, 
pero la producción la hará el niño/a.
3. Clasificar, a modo de juego:
Colocar las tarjetas y los frascos sobre una mesa. Por turnos seleccionar una tarjeta y colocarla en el frasco que corresponda.
Al clasificar las tarjetas será valioso que infancias y adultos cuenten alguna experiencia vivida que coincida con la de la imagen, dibujo o foto, o que les recuerde otras situaciones 
en las que se sintieron así.
Este material será un recurso en casa para otros momentos en los que ciertas emociones se manifiesten. A modo de ejemplo: si ocurre una situación que nos dá risa mientras estamos almorzando… podremos proponerle a nuestro hijo escribirlo en un papelito y solicitarle que guarde este registro en el frasco que le parezca que corresponde.
4. Traerán al jardín los frascos con nombre y apellido, en una bolsa cerrada, 
cuando nos reencontremos. 
5. Construir un Muñeco. 
Usando un tubo de papel higiénico o rollo de cocina, añadiéndole los detalles y dibujos que quieran, 
con los materiales que tengan a disposición.
Recuerden que es importante que cada infancia tome sus propias decisiones 
para hacer su propio Monstruo. 
Le colocarán nombre y también lo traerán al jardín, al regreso.

Importante: No haremos todas las actividades el mismo día.
Podremos escuchar el cuento y construir los frascos en primer lugar, al día siguiente recordar el cuento, elaborar y clasificar las tarjetas. En otra oportunidad… haremos nuestro propio monstruo.
Aclaración: los colores serán una gran ayuda para que niños y niñas comiencen a diferenciar y “nombrar” las emociones. Reconocerlas es un buen punto de partida 
para aprender a manejarlas luego.
¡VA A SER EMOCIONANTE!